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Islas Maldivas: El paraíso en el Océano Índico
Entre el cielo y la tierra
Las exóticas islas Maldivas son como las imaginamos y mucho más.Arena fina y blanca, cocoteros, mar templado, arrecifes bellísimos, peces multicolores... Desgranadas aquí y allá, estas 1.200 islas bañadas por las aguas turquesas del Océano Indico son un destino incomparable.
Podemos imaginarnos a Robinson Crusoe recalando en alguna de las más de 1.000 islas deshabitadas, o asombrarnos con su fondo marino, o navegar en una barca artesanal típica de la región si tenemos vocación de aventura o de vacaciones activas, pero, si lo nuestro es el "dolce farniente", sus innumerables playas paradisíacas nos invitan a no hacer nada, a la simple contemplación de tamaña belleza natural.
Desde hace mucho tiempo, las islas Maldivas son un destino privilegiado para la "luna de miel" pero, las familias no están excluidas, ni las parejas de cualquier edad, ni los aventureros solitarios que seguramente se encuentran con pares para compartir excursiones, comidas y paseos.
Por supuesto, el paraíso tiene su precio y las islas Maldivas no escapan a esa premisa...debemos considerar que sus precios no son módicos.
Una de las razones de los precios tan elevados en las islas tiene que ver con el concepto que el Estado tiene del turismo como empresa sustentable y que y pretende preservar la belleza de sus playas, de sus lagos turquesas de aguas cristalinas y tibias y de su fondo marino. En las Maldivas no encontraremos polución de ningún tipo. Pero no debemos engañarnos, están muy lejos de ser un destino de aventura, no iremos a ningún lugar virgen jamás invadido por la mano del hombre, todo lo contrario, prácticamente la única manera de pasar unas vacaciones en las Maldivas es de modo organizado, muchos de los atolones que forman el país son ocupados en su totalidad porHoteles Resort. Algunos atolones permiten escapar a esta modalidad pero, son muy pocos.
Es casi imposible visitar el país sino es a través de un operador turístico
La República de las Maldivas, situada al sudoeste de Sri Lanka, está dividida en 26 atolones, su capital es Malé, una isla más pequeña que muchas ciudades, apenas si tiene más de 100.000 habitantes.
La religión predominante es el Islam a pesar de haber sufrido diferentes períodos coloniales ejercidos por Portugal, Holanda e Inglaterra.
Esta república presenta una característica que le ha valido su desgracia recientemente y es la de ser el país más bajo del mundo, apenas 2,3 metros sobre el nivel del mar y a raíz del lamentable tsunami que sufrió toda la región del océano Indico, en diciembre del año 2004, quedó casi totalmente sumergida. No se contabilizaron muchas víctimas pero todas las islas fueron afectadas durante algunas horas por el fenómeno y muchas no pudieron ser rehabilitadas aún. Las islas más populares desde el punto de vista turístico son: Malé, Farukilhufushi, Ihuru, Kurumba, Bandos, Rihiveli, Vabbinfaru, Cocoa Island, Villavaru o Kudahithi.
Los maldivenses hablan "dhivehi", su lengua oficial pero, casi todos se comunican perfectamente en inglés, la moneda oficial es la "Rufiya".
Viajar a Maldivas en avión se puede realizar de modo directo desde muchas ciudades de Asia y Europa, no siendo muy frecuente el tráfico aéreo desde otras latitudes, como América del Sur. El aeropuerto internacional "Male International Airport" se encuentra en la isla Hulhulé a tan sólo 3 Km. de la capital. Es posible encontrar vuelos de bajo costo hacia este destino. El transporte hasta el centro de la ciudad se realiza generalmente en taxi pero, también en botes y se puede alquilar un coche en dependencias del aeropuerto.
El transporte entre la "isla aeropuerto" y la capital se realiza en barco con una frecuencia de 15 minutos durante el día y de 30 minutos después de medianoche, otras embarcaciones nos llevan directamente a las islas-hotel.
Otro aeropuerto internacional del país es el de Gan, que también recibe algunos vuelos bajo costo y que es utilizado como destino por mucho operadores turísticos que operan con islas-hoteles del sur del país.
Para desplazarse en el país, el medio de transporte más popular es la barcaza tradicional llamada "doni", muchas están motorizadas y otras son impulsadas por un barrenador ubicado en la parte posterior de la embarcación. Esta embarcación se sigue realizando en madera de cocotero como desde hace siglos.
Otro medio de locomoción entre las islas es el "speed-boat" cuyo precio es de U$A 100 por hora y que se utiliza para las distancias más largas. Debemos tener en cuenta nuestros horarios de llegada y partida y la distancia de nuestro hotel del aeropuerto porque la navegación nocturna ínter islas está prohibida.
También el enlace entre Malé y las islas se realiza con hidroaviones, para ello existen dos compañías.
En la isla de Malé el taxi es un medio de transporte frecuente, son muy numerosos y -como en todos los sitios turísticos- es conveniente pactar el precio antes de viajar porque suelen aprovecharse del turista incauto.
En algunas islas-hoteles suelen alquilar bicicletas para pasear.
La fórmula de alojamiento en "islas-hoteles" existe en las Maldivas desde el año 1972 y surgió luego de un estudio realizado por una consultora danesa a pedido de las autoridades gubernamentales. La idea era explotar el turismo pero de un modo sustentable y que el mismo no modificase substancialmente a la sociedad. Desde ese concepto, el turismo salvaje, sin control estatal y el alojamiento en casas particulares está absolutamente prohibido, incluso visitar las islas habitadas está prohibido sin expresa autorización.
Estas islas-hoteles son como hoteles resort que brindan absolutamente todas las comodidades y servicios que podamos imaginar y hay un único hotel por isla aunque ofrecen diferentes categorías de alojamiento y las tarifas están en función de esas prestaciones o de distancia al mar o de la vista panorámica. Las más caras, por lo general, tienen playa privada o son bungalows sobre pilotes en las lagunas que forma el mar.
Las tarifas también varían si el hotel está orientado a cooptar al turista que sólo busca relax completo, si se trata de hotel tipo Spa, o si está orientado hacia el turista que busca desarrollar las actividades deportivas que se pueden realizar en las islas (submarinismo, esnorquel, surf, etc.) ya que ofrecen menos confort en las prestaciones hoteleras pero tienen más instructores o actividades planificadas, o si se trata de los hoteles resort preparados para la contención de todos los miembros de la familia.
Las tarifas también varían en función del régimen de pensión (media pensión o pensión completa). La elección es muy importante porque difícilmente se pueda cambiar de isla una vez llegados al lugar y debemos considerar todas las ventajas y desventajas de cada oferta hotelera.
Otro estilo de vacaciones en las islas Maldivas es la de embarcarnos en un crucero.
En esta fórmula también hay diferentes propuestas de actividades, desde navegar tranquilamente por las diferentes islas, desembarcar en las deshabitadas para realizar mini-safaris, bucear con instructores y tomar sol en cubierta.
Muchas propuestas de alojamiento flotante presenta el país, desde simples domis provistos de agua dulce y electricidad a barcos de gran calado provistos de todo el confort como aire acondicionado, agua caliente, restaurante, bar y, por supuesto, instructores y equipos deportivos a disposición de los pasajeros.
Es casi imposible ir de vacaciones a las islas Maldivas sin contratar el servicio de un operador de turismo. En temporada baja podemos llegar a las islas y buscar en el aeropuerto, en la recepción de los diferentes resorts las ofertas hoteleras y disponibilidades pero, en temporada alta casi la totalidad de la oferta hotelera está completa.
Un crucero por las islas es, quizás, el medio más eficaz para descubrir la diversidad que se esconde y podemos optar por un crucero clásico o, según nuestro estado físico, un crucero de buceo. Muchas personas que aman particularmente este destino y que podrían considerarse "habitués" de las islas optan por repartir varias semanas de vacaciones en diferentes propuestas. Una semana en una isla-hotel y una semana en un safari de buceo, por ejemplo. Los cruceros navegan por el archipiélago siguiendo un itinerario definido por las condiciones climáticas y las corrientes marinas, realizan escalas en islas-hoteles o islas deshabitadas, no se detienen en las islas que están habitadas por los ciudadanos maldivenses.
La mayoría de los paquetes turísticos incluyen una excursión a Malé, un día es suficiente para descubrir una capital, que si bien es milenaria también es muy pequeña. Lamentablemente se tiene muy poco contacto con la población y es casi imposible conocerla culturalmente. Es probable que en nuestro paseo podamos presenciar la llegada de los pescadores a la playa con su preciado cargamento, esto sucede a diario, alrededor de las 15 horas o visitar el mercado de frutos de mar. A proximidades del mercado de pescados existe otro mercado, el de madera.
Malé es tan pequeña que sólo tiene cuatro barrios, es agradable pasear por sus largas calles, tomar algo en sus bares o recorrer los bazares y ver los puestos de los vendedores de frutas. El Museo Nacional además de poseer un hermoso parque arbolado muestra algunas piezas interesantes de la historia del país desde el período preislámico hasta la época moderna. Hay también una mezquita que data del año 1656, con un minarete azul y verde muy particular, muy cerca se encuentra la tumba de Muhammad Thakurafaan, vencedor de los portugueses en el año 1573 y héroe nacional. El Centro Islámico tiene la mezquita más grande del país, construida en el siglo XVII, la Huskuru Miskiiy (Mezquita de los Viernes) puede albergar a más de 5.000 personas y es posible visitarla fuera de los horarios de los rezos. El palacio presidencial "Theemuge" mezcla tradición y modernidad y la galería Esjehi, dedicada a la preservación y promoción de las artes tradicionales y contemporáneas de las islas también son un destino turístico.
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